Efectos esperados del Programa
Con este programa estamos convencidos que cada cristiano Católico evangelizado se convertirá en un Evangelizador de su familia, comunidad etc., ya que este es el signo más evidente de que el Evangelio ha tocado su vida. Y es que cuando el Espíritu ha cambiado la vida de una persona y le ha hecho conocer “la vida en abundancia”, éste no desea otra cosa sino que todos su conocidos, especialmente los más cercanos a él, puedan conocer esta experiencia que cambio toda su vida.
Además, la experiencia espiritual que se desarrolla a lo largo del curso, especialmente con el retiro final, lleva a toda la comunidad a un COMPROMISO con Cristo y su Iglesia lo que los termina convirtiendo en “Discípulos-misioneros” que buscarán extender su amor a Jesús a todos los rincones de la Parroquia. Es desde esta experiencia que el cristiano se adhiera realmente a la Iglesia y con ella a todo el trabajo pastoral no solo en la línea “profética” sino en todas la áreas y pastorales que hacen visible el Reino en la comunidad.
Normalmente después del Curso, los participantes terminan por entender que la evangelización es algo que compete a todo cristiano y no solo a algunos. Que Los sacerdotes son importantes, pero que sin la participación de todos los laicos no se podrá avanzar, antes al contrario, como ha pasado hasta ahora, iremos siempre para atrás.
Finalmente, la dinámica que lleva el curso hace que los participantes lleguen a comprender que el Cristianismo es para todos los días, para todas las relaciones de la vida y no solamente para nuestras reuniones de apostolado y la celebración litúrgicas. Todo el evangelio en toda la vida.
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