María y la muerte
Pbro. Ernesto María Caro
Pregunta:
Hay algo que no es claro para mí y me gustaría que me aclarara algunas dudas sobre la Santísima Virgen María. La primera es: ¿La Virgen María murió y resucitó? Por otro lado, ¿Toca ese tema la Sagrada Escritura?
Respuesta:
Muy querido hermano: Respondo brevemente a tus preguntas. Quizás valdría la pena que empezara respondiéndote a la última pregunta y después pasar a la primera. Efectivamente, la Sagrada Escritura no toca directamente el tema de la resurrección de María ni de su Asunción a los cielos. De hecho, podemos decir que no existe nada escrito sobre este tema antes del siglo II. Todo lo que sabemos del final de la vida de María Santísima, lo tenemos por la tradición oral que llega hasta nuestros días. Esta tradición, debido al modo como los pueblos del desierto acostumbraban guardar la información, con gran veracidad y con el fin de que no se perdieran detalles, es considerada por la iglesia como parte de la revelación hecha por Dios a su pueblo.
Otra de las fuentes que nos acerca a los acontecimientos que ocurrieron en los primeros tiempos de la iglesia, es lo que se llama en teología: “la analogía de la fe”. Esto es, referir verdades teológicas o bíblicas de Jesucristo, a situaciones, personajes y elementos que ocurrieron bajo las mismas circunstancias.
Así, teniendo presentes estos dos recursos, la iglesia nos informa, por medio de la tradición, que María efectivamente murió, pero que su cuerpo no sufrió la corrupción. Este dato es comprobado por la analogía de la fe, que Jesús, aun siendo Hijo de Dios y por ello Dios mismo, en su naturaleza de hombre, sufrió la muerte. Siguiendo este discurso analógico, debemos deducir que la Santísima Virgen también, como él, resucitó, y que fue llevada al cielo, como testifica el dogma de la Asunción de María.
La única referencia bíblica que tenemos se hace por “apropiación” es decir validando un texto al contexto teológico. Es así como a partir del siglo III la Iglesia empezó a apropiar el tema del capítulo 12 del Apocalipsis a María Santísima. Este texto originalmente se refiere a la iglesia (la mujer coronada de estrellas). Sin embargo, después de San Justino, este pasaje fue interpretado (y hasta la fecha) en relación a María Santísima. Con esta apropiación e interpretación mariológica del texto podemos asegurar, como lo hizo el papa Pío XII en la Constitución Apostólica “Munificentissimus Deus” con la cual declaraba dogma de fe la Asunción de María, que “una vez terminad su vida terrena, la Santísima Virgen María fue llevada en cuerpo y alma al cielo”. (DS 2331-2332)
Espero que esto aclare tus dudas.